Esta novela cuenta la historia de Tomás, quien viaja a la Alemania de posguerra para intentar hallar esa parte de su vida que siempre intuyó como una carencia, aquello que evitó que pudiera ser una persona completa: su hermano mayor ­Thomas, o más bien su ausencia, pues este murió durante la Segunda Guerra Mundial. Al menos eso dice la historia oficial que llegó hasta el padre y que fue transmitida por este a Tomás, quien, a pesar de que jamás conoció a su hermano, siempre lo ha echado en falta. Así, una ausencia inexplicable ha delineado su carácter, más bien taciturno, críptico: «Si tu hermano no hubiera muerto, tú no habrías nacido», le dijo su padre alguna vez. ¿Cómo vivir con esa revelación? Es así que decidirá emprender un viaje en busca de los pasos de ­Thomas, su otro, y desvelará una serie de intrigas y secretos que trastocarán su vida, completándola por primera vez, aunque de un modo trágico. Se establece entonces un juego del doppelgänger que llevará al límite el género de la novela policial o de investigación, tan cara al autor de este libro. ­Thomas y Tomás es una novela magistral que nos regresa al mejor Carlos Calderón Fajardo.